Le puse Lily
Decidí llamarla Lily, porque parecía muy dulce a pesar de todo lo que había sufrido. Su vientre hinchado insinuaba la vida que pronto llegaría. “Pronto vas a ser mamá, Lily”, le susurré, esperando que le gustara su nuevo nombre. Parpadeó, probablemente intentando comprender. Ponerle un nombre la hacía sentirse menos sola en aquel lugar extraño.

La llamé Lily
Asumir la responsabilidad
Lily había depositado su confianza en mí, y sentí inmediatamente un deber hacia ella. Mientras acariciaba su pelaje, noté un bulto peculiar bajo él. “¿Qué es esto? Susurré, curiosa pero tranquila, examinándolo detenidamente para ver si sólo era parte de su embarazo. “Tienes una historia que contar, ¿verdad, Lily? Murmuré, intentando reconstruirlo todo.

Asumir la responsabilidad